viernes, 4 de diciembre de 2009

Los dueños de ese edificio son paisas


Un sábado como cualquier otro, suena el celular como cualquier día, contesto como de costumbre. Acá conmigo, ¿Allá con quién?. Preguntas de rutina que un hombre de costumbres hace cada vez que contesta el teléfono. Es que yo si soy un hombre de costumbres.

Oiga paisa, exclamó una voz al otro lado del celular, ¿por qué no nos acompaña a ver el apartamento que vamos a comprar?.
- Claro, -respondí- apenas me bañe le marco al celular. Después de un baño no tan corto, cumplí con mi promesa. Es que yo si soy un hombre de promesas.

Luego de terminados todos los preparativos para tan magna excursión, emprendimos nuestro viaje en carro por la ciudad. Es que en la ciudad hay que andar en carro y mientras mas nuevo mejor, esos son los razonamientos que uno debe de hacer. Es que yo si soy un hombre de razonamientos.

Después de tan largo viaje y en el ocaso de la tarde bogotana, en frente nuestro, un edificio de unos ocho pisos, entonces se me ocurrió la gran pregunta. -¿Este es el edificio?. ! Está del putas¡. ¿Cómo se le ocurre?, me respondió en tono enérgico, ese edificio es de paisas.

1 comentario:

Alexander Tamayo dijo...

Eso de ser paisa hay veces que es bien dificil. No sé si infundado o nó, pero siempre hay personas que tienen una frase, un comentario de mal gusto.

Muchas veces he pensado que es envidia, otras que es falta de argumentos, otras que hasta razón tendrán. Pero la verdad, es que tanto comentario "negativo" hay veces que abruma.

Eso del estigma de prepagos, traquetos,ladrones, sicarios...... Que peso tan grande.

Pero al final no importa, soy paisa, antioqueño, montañero y sobre todo me siento muy orgulloso. Que sigan hablando